Federico García MoralesTlaxcala, 1994 En la historia de la Humanidad hay pocos momentos carentes de promesas, sobre todo de promesas para la gente joven. Hasta se podría decir que siempre ha habido alguna promesa: por último las delicias de la Otra Vida. Pero ahora no. La generación que hoy va por las prepas y las universidades (¿se hablara en algunos años de ellas como una misma generación?), es quizás la primera que carece de promesas. Si hasta sus maestros han recibido de la SEP el cariñoso recordatorio de que no deberán esperar aumentos salariales, que es imposible, que el estado ya no da para más. |
Visita:http://rcci.net/globalizacion/index.htm
No hay comentarios:
Publicar un comentario